Queda demostrado una vez más que en España ni hay democracia (no existió nunca) ni libertad de opinión para algunos.
Cualquier político puede decir lo que se le antoje aunque no sea correcto, como es el caso de los nacionalistas que están en contra de la Constitución y que quieren acabar con España y el actual modelo de estado. Quien quiera podrá en este país inventarse cosas del vecino sin que le ocurra nada.
Sin embargo si un alto mando militar se limita a reproducir el artículo 8.1 de la Constitución, nuestra norma suprema, se le cae el pelo.
Ayer, durante la Pascua Militar, el teniente general José Mena Aguado, jefe de la Fuerza Terrestre del Ejército de Tierra, alertaba en su alocución de que si los límites que marca la Constitución fuesen sobrepasados, sería de aplicación el artículo octavo de la Constitución: “Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial, y el ordenamiento constitucional”.
El ministro Bono expresó su convicción de que «un militar no debe emitir públicamente ningún criterio político», al tiempo que se mostraba seguro de que los máximos responsables del Ejército pondrían «de relieve cuál es la sanción que cabe atribuirle a un militar que falta a su deber, que es cumplir con la Constitución y respetar un poder político democráticamente elegido»
Aplaudo la alocución de este militar español. No creo que haya faltado a su deber, que es el de defender España. Tampoco creo que incumpla la Constitución, pues se limita a decir lo escrito en su artículo 8.1. Y en cuanto a respetar el poder político democráticamente elegido, esto sólo debe hacerse en tanto en cuando dicho poder actúe conforme a la Constitución, no como siervo de los nacionalistas, y no permita la disgregación de España. ¿Están los socialistas y sus “amigos” respetando a España, con todo lo que ello conlleva?
Se ve que a los socialistas y nacionalistas les ha fastidiado que sea un militar el que les de una clase magistral de derecho constitucional. Este teniente general será destituido, pero podrá vivir con la cabeza bien alta por defender lo que juró, defender España. Y esto es algo que no podrán hacer los que nos gobiernan.
VIVA ESPAÑA
VIVA LAS FUERZAS ARMADAS